Mayo, 2020

Mayo, 2020

 

Por Juan Antonio Travieso

 

La situación actual en el mundo y la Pandemia Covid 19 nos plantea nuevos escenarios.

 

Veamos una foto de la realidad de hace pocos días que parecen siglos:

 

Durante el mes de enero en Australia se vio en vivo y en directo la muerte de 500 millones de animales, personas no humanas, y cerca de 30 personas humanas.

 

En febrero apareció el COVID 19.

 

Hoy en Estados Unidos de América hay 40 millones de desocupados y la tapa del New York Times necesitó toda la hoja para marcar la estadística.

 

Recordemos que se trata de prácticamente la población de la Argentina

 

Y entonces, ¿qué hacemos nosotros los profesores?

 

Hay sensación de que a veces los juristas parecemos intelectuales burocratizados, alejados de la realidad que nos conmueve.

 

Es necesario que el derecho se haga cargo de lo que hay que hacer con los combates contemporáneos como el del COVID hoy. No ignoramos que es un grito en la soledad, porque el derecho observa y existe la sensación de que no hace nada.

 

¿Qué hacer en este mundo de cambios?

 

Hay dos palabras que describen esta situación: incertidumbre y perplejidad o quizás como dice Bauman: “la certeza incierta con la protección desprotegida”

 

Necesitamos que los sueños de Kant se hagan realidad y los desvelos de Kelsen operen sinérgicamente en el derecho.

 

Ahora bien, ¿cuál puede ser la solución? Proponemos dos salidas:

 

Primera: un nuevo paradigma, que signifique desarrollar una nueva noción de modernidad, con una inmersión global, sujeto a la prevención de todo tipo de desastres, nuevas formas de curar  o contagiar enfermedades, nuevas formas de encarar soluciones y extender derechos y libertades.

 

Stuart Mill, un nuevo paradigma que consiste en la libertad de comprometerse en experimentos de vida.

 

Segunda: recordemos la acción de la ONU a través de la Asamblea General y la Secretaría General, junto con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

 

Muchos documentos y resoluciones de indiscutible valor jurídico y moral con un signo de interrogación en el futuro.

 

¿Son suficientes?

 

Recordemos también que los medios hablan del silencio ensordecedor de la ONU e incluso se habla de reformar la ONU

 

En realidad, el tema es encarar las luchas contra las pandemias

 

¿Cuáles son las nuevas Pandemias igualmente letales que el Covid 19?

 

1. La pandemia de la corrupción

 

2. El obstáculo de La soberanía y los nacionalismos. Hace pocos días se conoció el fallo del Tribunal Constitucional Alemán y la falta de solidaridad en la Unión Europea al negar la ayuda del Banco Central Europeo (BCE) a la zona euro con la compra masiva de deuda pública

 

3. Hace pocos días también se conoció una declaración del Colectivo de artistas e intelectuales que plantea “No volver a lo de siempre" tras la pandemia del Corona Virus recalcando que una cuestión de supervivencia, tanto como de dignidad y coherencia

 

¿Qué hacer en lo inmediato? La hoja de ruta de los profesores. El Destino del Derecho Internacional

 

¿Por qué nos referimos al destino?

 

Hay una cierta sensación de que nos estamos refiriendo a una fuerza desconocida que opera en los acontecimientos, una especie de hado, esto es una divinidad o fuerza desconocida hipotética que rige la vida de una persona.

 

En realidad, nos referimos al destino en nuestra materia, siguiendo al profesor Marttti Koskeniemmi.

 

Pero por ahora, es imprescindible luchar para impedir el avance del Estado sobre los derechos humanos y garantías con la excusa de que es la única forma de luchar contra el covid-19.

 

Hay que tener presente que los confinamientos y el distanciamiento social no son buenos para las democracias. El mismo recorte de libertades se aplica a las normas de privacidad. Nuestra privacidad ya estaba en peligro por el big data, pero usar esos datos ahora parece haberse convertido en la norma. Es probable que la nueva normalidad signifique más ‘Gran Hermano’.

 

Por otra parte, los nacionalismos y populismos han resurgido incluso en naciones de vanguardia. Hay que resguardar nuestros regímenes republicanos. Hay que mantener en todo el mundo la división y equilibrio de poderes, la plena vigencia del estado de derecho con una total e irrestricta libertad de prensa.

 

Ese es el proyecto que asumimos los  profesores de derecho.

 

Para  evitar las profecías de Casandra y sus pronósticos para escuchar el pronóstico de Pandora y su caja en la que siempre nos quedará la esperanza.

 

Citar: elDial.com - CC63EB

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